¿Alguna vez has hecho una compra por correo? Recuerdo cuando lo hice por primera vez en los noventa. Era un doble disco de los Beatles y estaba impaciente por tenerlo. Sin embargo, también estaba lleno de dudas: ―¿Llegaría realmente mi pedido? ¿Sería lo que esperaba?―. No obstante, confié y esperé pacientemente. Y cuando finalmente llegó, el color rojo de aquella funda de cartón brillante me hizo sentir como si estuviera en el futuro. Nada más lejos de la realidad. Tan solo era un niño satisfecho por haber confiado, y emocionado en el pasillo de mi casa ante aquel cartero de Correos que había subido tres pisos de escaleras con un casco de moto amarillo puesto para hacerle entrega de un gran sobre cuadrado a quien finalmente resultó ser el Sr. Palacios.
Esa experiencia me enseñó algo importante sobre el comercio electrónico: a veces tenemos que confiar en lo desconocido. Y eso es exactamente lo que estamos haciendo hoy en día con el avance del Web3, el metaverso, y las tecnologías de realidad virtual y aumentada. Puede parecer extraño e innovador en este preciso momento, pero pronto se convertirá en algo natural en nuestra vida cotidiana.
Estas tecnologías nos permiten crear experiencias de compra inmersivas que mejoran la satisfacción del cliente y reducen las devoluciones. El blockchain hace que las transacciones sean más seguras y transparentes. Empresas grandes como Alibaba y Walmart están utilizando el blockchain para garantizar la seguridad y la transparencia en las transacciones.
La realidad virtual y aumentada son tecnologías emergentes que mejoran la experiencia de compra en línea. Empresas como Ikea y Converse están usando la realidad aumentada para permitir a los clientes visualizar cómo un producto se vería en su hogar o en su cuerpo antes de comprarlo.
El metaverso es otra dimensión digital que está siendo desarrollada a medida que la tecnología avanza. En el metaverso, las personas pueden interactuar en un mundo virtual desde el tiempo real. Esta tecnología está cambiando la forma en que los productos y servicios son presentados y promocionados en línea. Las empresas comienzan a utilizar el metaverso para crear experiencias de compra inmersivas que los clientes no podrían disfrutar en el mundo real. Estoy seguro de que por este motivo disciplinas tales como el visual merchandising y el interiorismo evolucionarán a pasos agigantados.
Pero para llegar a ese futuro, debemos confiar. Debemos confiar en que estas tecnologías mejorarán nuestra vida y debemos estar dispuestos a adaptarnos a ellas. Yo confié en mi primer pedido por correo y al final, fue una experiencia emocionante. Del mismo modo, si confiamos en el futuro del comercio electrónico, estaremos abriendo las puertas a una experiencia de compra inimaginable.